La actual situación de encarecimiento del mercado energético obliga, tanto a empresa como desde los propios hogares, a tomar medidas para reducir el consumo de energía y aprovechar al máximo los recursos disponibles.
Esta optimización del uso de la energía es lo que se entiende por eficiencia energética. Es decir, la eficiencia energética es la capacidad de obtener los mejores resultados en cualquier actividad, empleando la menor cantidad posible de recursos energéticos.
Esto nos va a permitir reducir el consumo de cualquier tipo de energía, como la eléctrica, su coste y con ello los posibles impactos ambientales asociados.
Ahora bien, para mejorar la eficiencia energética va a ser necesario llevar a cabo una serie de cambios o mejoras en la gestión, en los hábitos e, incluso, inversiones en tecnología adecuada.
Medidas para mejorar la eficiencia energética en las empresas
La escalada de precios de la energía ha afectado considerablemente a España, cuyo recibo de la luz ha aumentado más del doble que en el resto de la Eurozona, superando este incremento el 60%.
Aunque el Gobierno ha lanzado un plan que contempla la reducción del consumo de energía de entre un 5,1% y un 13,5% hasta marzo de 2023 y rebajará la factura en hogares y empresas, hay una serie de medidas que, aun así, se pueden tomar para lograr un mayor ahorro energético.
Estas medidas de eficiencia energética para las empresas permiten un ahorro en la factura de la luz, a través de mejoras en su sistema de iluminación:
- Sustituir el sistema de iluminación tradicional por un sistema de iluminación LED inteligente, de menor consumo. Una bombilla LED usa un 60% menos de energía que una bombilla de bajo consumo, funciona con menos potencia y solo transforma el 10% de su energía en calor.
- Programar la actividad del sistema de iluminación mediante un sistema de control centralizado. Este permitirá automatizar y monitorizar el uso de la energía, proporcionando información detallada del consumo real con la que generar estrategias para un mejor consumo energético.
- Instalación de sensores de movimiento y temporizadores para los espacios de circulación intermitente (pasillos, salas de reuniones, etc.). La iluminación se activaría a demanda, solo cuando se detecta la presencia de personas, incrementando así el ahorro energético.
- Optimizar la arquitectura interior de la oficina, aprovechando al máximo la luz natural, instalando mamparas claras o repintar las paredes de blanco para dar mayor luminosidad, etc.
Estas medidas a tener en cuenta, sobre el sistema de iluminación, pueden ir acompañadas de otras medidas de carácter general:
- Aislamiento: Asegurar que la empresa esté bien aislada para reducir la pérdida de calor o frío, lo que ayudará a reducir el consumo de energía.
- Generación de energía renovable: Instalar paneles solares u otro sistema de generación de energía renovable para autoconsumo, que permita producir su propia energía y reducir la dependencia de la energía de la red.
- Educación y sensibilización: Sensibilizar y educar a los empleados sobre el uso eficiente de la energía, y promover prácticas sostenibles en el lugar de trabajo.
- Evaluación y seguimiento: Realizar una evaluación regular del uso de la energía y seguir el progreso para identificar áreas de mejora y oportunidades de ahorro.
Tecnología eficiente para lograr ahorros energéticos significativos
Para poder llevar a cabo las medidas de eficiencia energética, las empresas deberán disponer de la tecnología adecuada.
En este sentido, hay varias tecnologías disponibles que pueden ayudar a las empresas a ahorrar en su factura de la luz:
- Sistemas de generación de energía renovable: como paneles solares, sistemas eólicos, plantas biogás, etc.
- Sistemas de almacenamiento de energía: como por ejemplo las baterías. Estos sistemas permiten a las empresas almacenar la energía generada por medios renovables para uso futuro.
- Sistemas de control de energía: para automatizar y monitorizar el uso de la energía en la empresa, identificar áreas de mejora y oportunidades de ahorro.
- Iluminación LED: Las luces LED son más eficientes en términos de energía y tienen una mayor duración que las luces tradicionales, lo que ayuda a reducir los costos de iluminación.
- Sistemas de eficiencia energética: como sensores de movimiento, los programadores de encendido/apagado y los termostatos inteligentes, ayudan a optimizar el uso de la energía en la empresa.
- Sistemas de automatización de edificios: que permitan a las empresas controlar y optimizar el uso de la energía en el edificio, incluyendo la iluminación, calefacción, ventilación y sistemas de climatización.
- Software de gestión de energía: permite a las empresas llevar un registro de su consumo energético y generar informes para identificar áreas de mejora y oportunidades de ahorro.
Junto a esta tecnología, hay que incluir a la inteligencia artificial (IA), sumada al internet de las cosas (IoT) y a la conectividad 5G, que abren nuevas posibilidades a los usuarios para conocer los patrones de consumo y mejorar la eficiencia energética, tanto en empresas como en los hogares. Esto es gracias a la combinación de dispositivos inteligentes y automatización.
Existen dispositivos electrónicos que se conectan con los aparatos eléctricos y electrónicos, y envían sus datos de consumo a una plataforma en la nube. Con estos datos se puede generar algoritmos de machine learning y estimar los patrones de gasto en la empresa o en el hogar.
La información puede llegar directamente, vía smartphone, con notificaciones, tablas y gráficos sobre su huella eléctrica.
La inteligencia artificial y, en particular, el machine learning, es capaz de extraer datos de consumo eléctrico y determinar un patrón. Este patrón de consumo sirve para reducir el gasto de dos maneras: cambiando la forma de consumir energía o cambiando nuestro contrato por aquel que ofrezca mejores tarifas para nuestras franjas de mayor consumo.
En cuanto al IoT, este engloba elementos tipo sensores conectados a la red de Internet (control de la climatización, de la iluminación, etc.).
Los asistentes virtuales también estarán cada vez más presentes en empresas y hogares, pudiendo colaborar en la mejora de la eficiencia energética.
Estos pueden llegar a proporcionar asesoramiento específico sobre el potencial de ahorro energético a la hora de emplear un aparato eléctrico y promover comportamientos para mejorar la eficiencia energética en la empresa u hogar (informar sobre el nivel de consumo, estimación de la factura, alertar de altos consumos, etc.).
Toda una serie de mejoras y avances tecnológicos dirigidos a mejorar la eficiencia energética y, con ello, también reducir la huella de carbono en las empresas.
Reducir y optimizar el consumo de energía son acciones que no solo van a repercutir en un menor gasto en energía, sino que también tiene sus implicaciones medioambientales, haciendo más sostenibles a las propias empresas.
Desde Genia Energy Solutions ayudamos a estas empresas a dar este paso hacia la eficiencia energética y la sostenibilidad, poniendo a su disposición tecnología innovadora que permite optimizar el consumo energético y reducir la huella de carbono.