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La importancia de la auditoría energética en las empresas

La importancia de la auditoría energética en las empresas

El interés de las empresas en transformar sus modelos de negocio y ajustarse a los parámetros de sostenibilidad y eficiencia energética ha situado a la auditoría energética como una solución estratégica necesaria.

Con esta herramienta, las empresas pueden obtener un diagnóstico claro y preciso de sus operaciones energéticas, lo que permite identificar ineficiencias y áreas de derroche energético.

Además, la creciente presión por parte de consumidores, inversores y socios comerciales para adoptar prácticas sostenibles añade otro nivel de relevancia a la auditoría energética.

En este contexto, las empresas no solo buscan responder a las obligaciones legales, sino que también persiguen la excelencia operativa y el liderazgo en sostenibilidad.

Al implementar medidas basadas en los resultados de una auditoría energética, las empresas no solo reducen sus costos operativos y energéticos, sino que también fortalecen su posición en el mercado como líderes responsables y comprometidos con el futuro del planeta.

 

En qué consiste una auditoría energética para empresa

Una auditoría energética es un estudio sistemático del uso de energía en una empresa, diseñado para identificar oportunidades de mejora en la eficiencia energética y reducir los costos operativos. 

Este estudio comienza con una revisión detallada de los registros históricos de consumo de energía, seguido de una inspección física de las instalaciones para evaluar el rendimiento de los sistemas energéticos existentes, como la calefacción, ventilación, aire acondicionado, sistemas de iluminación y maquinaria.

Durante la auditoría, los auditores hacen visitas físicas a las instalaciones y utilizan diversas herramientas y tecnologías especializadas para las mediciones, tales como termografías infrarrojas, analizadores de flujos de energía y medidores de consumo. Esto les permite obtener una imagen precisa del flujo de energía dentro de la empresa.

Con la información y datos obtenidos se pueden detectar anomalías como fugas, sobrecarga en los sistemas o equipos obsoletos que incrementan innecesariamente el consumo de energía.

Basado en esto, los auditores energéticos elaboran un informe detallado que no sólo cuantifica el consumo de energía, sino que también identifica áreas donde se pueden implementar mejoras.

Este informe incluye recomendaciones específicas, como la actualización de equipos, la mejora del aislamiento, la optimización de los procesos operativos y la implementación de nuevas tecnologías, todas destinadas a aumentar la eficiencia energética.

Además, una auditoría energética proporciona una línea base para futuras comparaciones y establece objetivos claros y alcanzables para la gestión energética. 

Esto es especialmente importante para empresas que buscan certificaciones ambientales o que desean cumplir con normativas internacionales de eficiencia energética y reducción de emisiones.

 

Cuándo se debe hacer una auditoría energética

Determinar el momento óptimo para realizar una auditoría energética depende de varios factores estratégicos y operativos.

Una práctica recomendable es planificar auditorías energéticas regulares, las cuales pueden ser anuales o cada varios años, dependiendo de la escala y la complejidad de las operaciones de la empresa. Esto asegura un monitoreo constante y la adaptación a las cambiantes condiciones del mercado y tecnológicas.

Además, hay situaciones específicas que pueden precipitar la necesidad de una auditoría energética:

  • Regulaciones y cumplimiento de normativas: Las empresas pueden necesitar realizar auditorías energéticas para cumplir con requisitos legales o normativos, especialmente en industrias reguladas donde la eficiencia energética es supervisada por agencias gubernamentales. En España, el Real Decreto 56/2016 recoge que las grandes empresas o grupos de sociedades de más de 250 trabajadores están obligados a realizar una auditoría energética cada cuatro años que “cubra, al menos, el 85 por ciento del consumo total de energía total” (artículo 3). En el resto de casos pueden ejecutarse de forma voluntaria.
  • Cambios significativos en la producción o el uso de las instalaciones: Si una empresa expande sus operaciones, modifica sus procesos de producción, o realiza cambios significativos en el uso de sus instalaciones, es importante realizar una auditoría energética. Estos cambios pueden alterar los patrones de consumo de energía, y una auditoría ayudará a ajustar las prácticas de gestión energética para alinearlas con las nuevas condiciones.
  • Incremento en los costos de energía: Un aumento inesperado en las facturas de energía puede indicar problemas de eficiencia que una auditoría energética puede identificar y corregir.
  • Búsqueda de certificaciones de sostenibilidad: Para obtener o renovar certificaciones de sostenibilidad, como LEED o BREEAM, las empresas a menudo necesitan demostrar que están llevando a cabo esfuerzos continuos para mejorar su eficiencia energética, lo cual incluye realizar auditorías energéticas periódicas.
  • Antes de grandes inversiones en infraestructura: Antes de comprometerse a grandes inversiones en nueva infraestructura o renovaciones mayores, es prudente realizar una auditoría energética. Esto puede garantizar que las inversiones se alineen con los objetivos de eficiencia energética y sostenibilidad de la empresa.

La realización de auditorías energéticas en estas situaciones ayuda a las empresas a mantener el control sobre su consumo de energía y fortalece su capacidad para planificar de manera proactiva, reducir costos y mejorar su competitividad en el mercado.

 

Beneficios de una auditoría energética

Los beneficios de llevar a cabo una auditoría energética en la empresa son varios, teniendo un impacto significativo, tanto en la eficiencia operativa como en la responsabilidad corporativa:

 

  • Reducción de costos: Este es quizás el beneficio más directo y tangible. Al identificar y corregir ineficiencias, las empresas pueden reducir su consumo de energía y, por lo tanto, sus costos energéticos. Las mejoras pueden variar desde cambios simples, como la actualización de los sistemas de iluminación, hasta inversiones más significativas en equipos de alta eficiencia.
  • Mejora en la sostenibilidad corporativa: Al reducir el consumo de energía, la empresa también reduce su huella de carbono. Esto contribuye a los esfuerzos globales de mitigación del cambio climático y mejora la imagen pública de la empresa como entidad comprometida con la sostenibilidad.
  • Incremento en la competitividad del mercado: Las empresas que demuestran un compromiso con la eficiencia energética y la sostenibilidad a menudo disfrutan de una ventaja competitiva. Los consumidores y socios comerciales están cada vez más interesados en hacer negocios con compañías responsables desde el punto de vista ambiental.
  • Cumplimiento normativo: Con regulaciones cada vez más estrictas sobre eficiencia energética y emisiones de carbono, realizar auditorías energéticas puede ayudar a las empresas a cumplir con las normativas locales, nacionales e internacionales, evitando multas y otras penalizaciones.
  • Mejora en la gestión energética y operacional: La auditoría energética proporciona datos cruciales que ayudan a los gerentes y operadores a tomar decisiones informadas sobre la gestión de energía y operaciones. Esta información puede ser vital para la planificación estratégica a largo plazo y para responder de manera efectiva a los desafíos operativos y ambientales.
  • Fomento de la innovación: Al identificar áreas donde el consumo de energía puede ser optimizado, las auditorías energéticas pueden impulsar la innovación dentro de la empresa. Esto puede llevar al desarrollo de nuevos procesos o tecnologías que no solo mejoren la eficiencia energética, sino que también impulsen la innovación en productos y servicios.
  • Aumento en la vida útil de los equipos: Al mantener los sistemas energéticos operando de manera eficiente, las auditorías energéticas ayudan a prolongar la vida útil de los equipos, lo que reduce la necesidad de reemplazos costosos y minimiza la interrupción de las operaciones comerciales.

 

En definitiva, la auditoría energética es una herramienta de mucha utilidad en la gestión energética empresarial actual. No solo proporciona una base sólida para decisiones estratégicas en relación con el uso de energía, sino que también promueve una cultura de eficiencia y responsabilidad ambiental dentro de la empresa.

Al realizar auditorías energéticas, las empresas dan un paso hacia la optimización de sus operaciones y muestran un compromiso firme hacia la sostenibilidad.

Desde Genia E_solutions, podemos ayudarte a implementar la estrategia de sostenibilidad de tu empresa, proporcionándote soluciones tecnológicas dirigidas a la mejora de la eficiencia energética de las instalaciones de Iluminación LED Inteligentes, así como, a la eficiencia de los proyectos de biogás y biometano.

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